Fiesta millonario

Pedro Ripoll - 559 visitas

Un millonario celebra una fiesta en una de sus mansiones y, en determinado momento, pide que la música pare y dice, mirando hacia la piscina donde cría cocodrilos australianos:

- Al que salte a la piscina, consiga atravesarla y salir vivo del otro lado ganará todos mis automóviles. ¿Algún voluntario?.

Espantados, los invitados permanecen en silencio y el millonario insiste:

- Al que salte a la piscina, consiga atravesarla y salir vivo del otro lado ganará todos mis automóviles y mis aviones. ¿Algún voluntario?.

El silencio impera y una vez más el ofrece:

- Al que salte a la piscina, consiga atravesarla y salir vivo del otro lado ganará todos mis automóviles, mis aviones y mis mansiones.

En ese momento alguien salta a la piscina. ¡La escena es impresionante!. Una lucha intensa, el valiente se defiende como puede, les sujeta la boca a dos cocodrilos con los pies y las manos, tuerce la cola de los reptiles. Increíble. Mucha violencia y emoción. Parece una película de Cocodrilo Dundee.

Después de unos minutos de terror y pánico, sale el valiente hombre lleno de rasguños, hematomas y casi desnudo.

El millonario se le acerca para felicitarlo y le pregunta:

- ¿Dónde quiere que le entregue los automóviles?

- Gracias pero no quiero sus autos.

Sorprendido el millonario pregunta:

- ¿Y los aviones, dónde quiere que se los mande?

- Gracias, no quiero sus aviones..

Extrañado por la reacción del hombre, el millonario le pregunta:

- ¿Y las mansiones?

- Tengo una casa hermosa, no necesito las suyas. Se puede quedar con ellas.

No quiero nada que sea suyo.

Impresionado el millonario le pregunta:

-¿Pero si usted no quiere nada de lo que ofrecí, que es lo que quiere?

El hombre muy irritado responde:

- ¡ENCONTRAR AL CABRON QUE ME EMPUJÓ AL AGUA!

Moraleja:

Somos capaces de hacer cosas que a veces nosotros mismo no creemos que conseguiríamos, y a veces para lograrlo necesitamos de un pequeño empujoncito.

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